“EL TEXTO EXPOSITIVO Y LAS ESTRATEGIAS PARA UNA EXPOSICION” Curso : Comunicación II

Índice
Capítulo I 6
1 El texto Expositivo 6
1.1. Definiciones 6
1.2. Generalidades 7
1.3. Características 8
1.4. Tipos de textos expositivos 8
1.5. Estructura 9
1.6. Pasos para la elaboración 9
1.7. Funciones 10
Capítulo II 12
2 La elaboración de un buen discurso – Estrategias y Recomendaciones 12
2.1. Estrategias para la elaboración del discurso 12
2.2. Recomendaciones para la elaboración del discurso 14
Capítulo III 17
3 El texto expositivo como base del discurso 17
3.1. El discurso expositivo 17
3.2. Partes del Texto Expositivo 18
3.3. Pasos para el desarrollo de un texto expositivo. 19
Capitulo IV 22
Bibliografía 24
Anexo 1 25
Anexo 2 26

Introducción
Hemos escogido el tema “El Texto Expositivo y las Estrategias para una Exposición” porque consideramos que todo profesional en algún momento tiene que dirigirse al público por alguna razón y es sumamente importante tener herramientas que les brinde recomendaciones útiles y concretas para llevar a cabo un buen discurso; ya que el mensaje del tema expositivo es ayudar al expositor a seguir un orden y tener las capacidades para contar con el enfoque adecuado del tema a tratar.
Todos hemos asistido a diversos lugares donde hemos escuchado a un orador exponer múltiples temas; algunas veces entretenidos, otras veces aburridos. Los textos expositivos están presentes a nuestro alrededor, desde que iniciamos nuestra vida escolar, universitaria, trabajo, una obra literaria, una receta de cocina, etc.
El texto expositivo está presente siempre y su función es transmitir o proporcionar información de forma objetiva acerca de hechos, ideas, conceptos, sin que en él se exprese las opiniones o pensamientos del autor.
Es importante que el expositor tenga la habilidad de comunicarse elocuentemente por medio de la palabra. En los negocios, trabajo, escuela, o cualquier actividad hay que saber expresarse a través de un buen texto expositivo.
Capítulo I
1 El texto Expositivo
1.1. Definiciones
El texto expositivo es un tipo de texto cuya función es la de explicar o presentar un tema para darlo a conocer a otros, es decir informar o dar a conocer un tema que el presentador o expositor conoce bien.
Todo texto expositivo tiene como función comunicar, desde el punto de vista del expositor, un tema determinado, que el expositor conoce y quiere transmitir a otros, que no conocen del tema, de manera clara y precisa y le sea fácil entender.
Tenemos muchos autores que definen al texto expositivo de la siguiente manera:
“El texto expositivo presenta el resultado de un estudio, una reflexión, una investigación o un trabajo sobre un asunto o tema para darlo a conocer y explicarlo.” Arsenio Sanchez, Taller de lectura y redacción.
“Se define al texto expositivo como el que informa sobre un tema con la intención de ampliar los conocimientos.” Alicia M. Vázquez y Maria del Carmen G. Novo, Producción de textos y comunicación del conocimiento.
“La exposición es un tipo de discurso cuyo objetivo es el de ofrecer un tema cualquiera al receptor de forma clara y ordenada.” Alvarez (1997)
"Es aquel que cumple una función referencial. Su principal objetivo es informar, incluyendo comentarios aclaratorios, incorporando explicaciones y utilizando claves explicitas (títulos, subtítulos, alusiones)”, Matilde Frías, Procesos creativos para la construcción de textos: interpretación y composición.
Para nuestro equipo hemos considerado que, el texto expositivo es aquel que explica, informa, expone, presenta una información de manera objetiva, y que es presentada por un expositor que ha realizado una investigación, un estudio, o que posee un conocimiento profundo de un tema o asunto de manera objetiva y la desea transmitir a una persona o grupo de personas, de manera clara y precisa.
1.2. Generalidades
La diferencia entre lo oral y lo escrito no se debe únicamente al canal de comunicación por el que se transmiten los mensajes, sino que hablar y escribir son modalidades del lenguaje que se producen y se manifiestan —desde el punto de vista lingüístico y textual— de modos diferentes (cf. Tusón, 1997: 17-30). En efecto, son varios los factores que determinan las propiedades lingüísticas y textuales de los discursos: entre otros, el conocimiento mutuo de los interlocutores y el saber que comparten, la relación de igualdad o desigualdad, tal como han apuntado varios actores, (Bustos Tovar, 1995; Blanche-Benveniste, 1998; Gauger, 1998, entre otros).
Asimismo, el Texto Expositivo es el que presenta de forma objetiva hechos, ideas y conceptos. Su finalidad es informar sobre un tema determinado, de manera que el autor en ningún caso plasme sus opiniones; pero ésta no es la única función que sirve para transmitir información. Un texto expositivo proporciona datos, agrega explicaciones, describe con ejemplos y analogías, con el fin de guiar y facilitar la comprensión de determinados pensamientos y/o sentimientos. Generalmente está escrito en 3ra persona y es considerado un “puente” entre el emisor y el receptor.
Debemos agregar que el texto debe ser apropiado para el tipo de espectadores y estar ajustado a sus expectativas y necesidades; además de seguir un orden lógico.
1.3. Características
El texto expositivo como ya hemos dicho es un tipo de texto que se caracteriza por explicar, informar, comunicar un tema, un hecho, una realidad y lo vemos en libros, diarios, revistas, colegios, universidades, internet, trabajo, etc.

Son características de textos expositivos:
Objetividad – porque las ideas se deben de presentar tal y como son, de manera imparcial y objetiva. El texto expositivo muestra conocimientos u hechos sin que intervenga la opinión personal de su autor.
Precisión – porque debe de ser lo más exacto posible, sin ambigüedades dado que su función predominante es la de informar. Debe de utilizarse un vocabulario preciso, términos específicos de la materia que se expone, es decir palabras técnicas o “tecnicismos” si el tema que se expone es científico.
Redacción – la redacción debe ser clara y objetiva, se realiza en tercera persona verbal y utiliza formas impersonales. Predominan las oraciones enunciativas donde se comunica un hecho, pueden negar o afirmar algo. (1)
1.4. Tipos de textos expositivos
Coinciden varios autores en que los Textos Expositivos pueden ser de dos tipos:
Textos Expositivos Divulgativos o Informativos: Tipo de texto que va dirigido a un público amplio que usa información poco específica y léxico formal.
Textos Especializados o Argumentativos: Tipo de texto especializado que está dirigido a un público específico de un área de conocimiento determinado que requiere o usa un léxico especializado e información técnica.
1.5. Estructura
La estructura del texto expositivo es muy simple, se dividen en tres partes, introducción, cuerpo o desarrollo y conclusión.
Introducción – es la sección inicial de la exposición cuyo objetivo es la presentación del tema, hecho o asunto a tratar. En la introducción generalmente se describe el tema, hecho o asunto. También se pueden dar los antecedentes que podrían ser importantes para el desarrollo del tema central.
Desarrollo – el desarrollo es la parte más extensa e importante de la exposición. En esta porción se desarrolla o elabora la información de manera clara y ordenada. En esta porción se desarrollan las ideas principales y las secundarias que se derivan de la idea principal. Es conveniente tener una buena preparación acerca del tema para poderlo exponer de forma concisa, con la finalidad de ajustarlo al tiempo que se requiere para la exposición.
El texto que se utiliza en la exposición debe de ser acorde con el auditorio pero no por ello se omitirán las palabras técnicas o tecnicismos, los cuales deberán ser explicados o traducidos con la finalidad de que se puedan entender.
Conclusión - El final del discurso es fundamental, pues dado que se ha transmitido mucha información se debe de terminar con una recapitulación de ideas principales. El autor finaliza con la afirmación de una tesis o con sugerencias que abren nuevas posibilidades.
1.6. Pasos para la elaboración
Para elaborar un texto expositivo es necesario seguir cuatro fases:
Focalización: consiste en establecer con exactitud cuál será el tema de la exposición y a que publico irá dirigida, ya que los conocimientos que se expongan ya condicionarán la profundidad de la disertación y el vocabulario que se debe emplear. Esta primera fase es fundamental para asegurar la adecuación del texto.
Documentación: consiste en recopilar toda la información necesaria para preparar la exposición. Todos aquellos documentos (libros, folletos, enciclopedias, páginas de Internet, etc.) a los se recurra en busca de información se denominan fuentes. Para facilitar la documentación, debe tenerse siempre presente la focalización y pensar de antemano aquellos aspectos del tema que interesan, de modo que ni falte información trascendental ni se recoja otra innecesaria.
Organización: consiste en ordenar la información recopilada en bloques temáticos (o subtemas). Para ello, puede prepararse un guion o pequeño índice de la exposición. Los criterios fundamentales para la organización deben ser la claridad y la sencillez, de forma que se facilite lo más posible la comprensión del texto al receptor.
Redacción: consiste en escribir el texto final. La redacción debe hacerse considerando que:- Ya se ha decidido el orden en que se incluirá la información, que vendrá dado por el guion que se haya elaborado en la fase anterior.- Se empleará siempre la técnica del borrador, por lo que se redactará una primera versión que, después de revisada, dará lugar a una versión definitiva.- El texto resultante deberá seguir la estructura que ya hemos visto anteriormente: Presentación, Desarrollo y Cierre. (2)
1.7. Funciones
La función principal de los textos expositivos es informar. Sin embargo, no se limita a proporcionar solo datos sino que también añade explicaciones las que describe con ejemplos.
Las funciones principales de un texto expositivo son:
Informativa – porque presenta datos o información verdadera sobre hechos, fechas, personajes, teorías, datos, etc.
Explicativa – porque explica o desarrolla la información sobre los datos que brinda.
Directiva – porque actúa como guía de lectura, mostrando palabras claves y explícitas a lo largo del texto lo que permiten distinguir los conceptos principales. Capítulo II
2 La elaboración de un buen discurso – Estrategias y Recomendaciones
2.1. Estrategias para la elaboración del discurso
Un discurso es una reflexión. El Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia nos ayuda a entender que un discurso es la facultad de usar la mente (el razonamiento) para reflexionar o analizar los antecedentes, principios, indicios o señales de cualquier asunto con el fin de entenderlo. Por lo tanto, cuando reflexionas, estás discursando, es decir, aplicando tu inteligencia, para entender un tema y hasta para ser capaz de explicarlo inteligentemente a otras personas. Es una tarea que realizas en el interior de tu mente, una línea de razonamiento que sigues al deducir los asuntos.
Ahora bien, cuando expones los resultados de esas reflexiones, ya sea ante una o varias personas para proveerles la información o para que te ayuden a reflexionar aún más profundamente, decimos que estás presentando un discurso público o delante de ellas, lo que significa que los que te escuchan usan su inteligencia para entender lo que dices. Ese es el sentido principal que le damos para diferenciarla claramente de la conferencia.
Por otro lado, si queremos que el tema expositivo llegue a la audiencia, debemos utilizar palabras y frases que posean una estructura lógica.
En la elaboración del texto expositivo hay que tener presente la estructura para lograr que nuestro texto sea coherente, claro y entendible, según Arenas y Porras (3) plantean diversos tipos de estructuras en el discurso:
Problema/Solución: La forma de articular el texto se realiza mediante la descripción de un problema para a continuación aportar la forma de resolverlo. Este tipo de organización es frecuente en textos en los que se describe la actividad humana, como ocurre en los de historia.
Causal: La forma de organizar los contenidos en torno a una trama causal cuyas categorías básicas son antecedente y consecuente. Este tipo de estructura es utilizada para exponer acontecimientos naturales, y contiene expresiones como “por esta razón o como consecuencia….”
Descriptiva: Articula los contenidos como rasgos, propiedades o características de un determinado tema. En este tipo de estructura se utilizan palabras y expresiones que sitúan en el espacio distintos elementos, como “en la parte superior o en la parte inferior.” Si vamos a presentar apoyos visuales o ilustraciones se convierte en una buena estructura a utilizar.
Comparativa: Presenta los contenidos a través de las diferencias y semejanzas entre manifestaciones de dos entidades o fenómenos, y se hace notar con expresiones como “a diferencia de…”, “desde un punto de vista…”
Secuencial: Las ideas son organizadas a través de un ordenamiento temporal. Se puede realizar de una forma cronológica natural que se convierte en un arma fundamental cuando nuestra intervención pública gira en torno a un tema que se ha desarrollado a través del tiempo y queremos darle a la audiencia un contexto.
Temática: Consiste en presentar las ideas de forma cualitativa enumerando los puntos clave del discurso en un orden decreciente de importancia. Jerarquizamos las ideas comenzando por la más importante, podemos imaginar una pirámide invertida donde la idea más destacada se encuentra en la punta.
Espacial: Se basa en iniciar el discurso desde algo concreto para llegar a consecuencias más generales o viceversa: partir de lo general para concretar en una cuestión.
Cuando nuestro discurso trata sobre un hecho concreto o un factor, causa o consecuencia de otro en un largo periodo de tiempo, la estructura espacial es la idónea.
Teórica/Práctica: Consiste en explicar la teoría para a continuación demostrar y abordar un caso práctico de los hechos expuestos. Es una manera de estructurar el discurso para que la audiencia tenga una perfecta visión de lo tratado.
Es importante preparar en profundidad el discurso en todos sus aspectos con antelación:
• selección del tema a tratar y los objetivos que se persiguen
• recoger toda la información acerca del tema
• organizar adecuadamente las ideas
• preparar el material de apoyo que se va a utilizar
Debemos tener en cuenta en primer lugar la organización de las ideas del Tema Expositivo, para ello debemos:
• Definir claramente el objetivo
¿Qué es lo que se desea lograr con el Discurso?
• Poner un título llamativo al proyecto
¿Qué palabra, frase u oración comunicará la idea de la manera más fácil posible o despertará la curiosidad de los oyentes?
• ¿Cuáles serán las primeras palabras?
Con las primeras palabras se pretende captar la atención de los oyentes y despertar su interés en la explicación que se presentará inmediatamente después.
2.2. Recomendaciones para la elaboración del discurso
Para poder elaborar un buen texto expositivo se requiere seguir algunas pautas que nos ayuden a organizar y elaborar las ideas y poderlas plasmar en un discurso que sea fácil de entender para nuestros oyentes. Es recomendable seguir algunos pasos, los mismos que se detallan a continuación:
Seleccionar el tema que se desea exponer, elaborar un bosquejo e identificar el propósito específico del texto y el público objetivo.
Realizar una lluvia de ideas relacionadas con éste.
Investigar acerca del tema en distintas fuentes bibliográficas y seleccionar información relevante y significativa, que se pueda utilizar luego en el texto a escribir.
Elaborar un esquema para especificar los distintos ámbitos, que se abordarán, del tema seleccionado.
Construir la estructura básica del texto.
Es conveniente escribir unos días antes de la exposición un esquema que recoja los aspectos más importantes que se van a tratar y desarrollar.
Conviene preparar las respuestas a las posibles interrogantes que pueda tener el auditorio.
Es muy recomendable ensayar la conferencia varias veces ante un espejo o alguien de confianza. De esta forma se conseguirá una mayor fluidez verbal y se ejercitará la voz para conseguir que ésta sea firme y sonora. Adicionalmente es conveniente realizar una visita previa al auditorio, incluso que ensaye su discurso en él.
No se debe memorizar la charla ya que le quitará toda la espontaneidad y naturalidad.
Es importante hacer uso de la precisión, por lo que éste debe ser exacto hacia lo que se quiere comunicar, así no se dejará a ninguna persona a medio camino logrando guiar al oyente por la ruta correcta.
Se sugiere captar y mantener el interés del público a través de la intervención, así como facilitar la comprensión del mensaje que emitimos.
No olvidar en ningún momento el vigor al hablar, es aconsejable tener preparado variedad de ejemplos, hechos reales e ilustraciones personales para mantener la atención de la audiencia.
Es imprescindible el conocimiento de las características del público asistente, tanto en lo que se refiere a su conocimiento del tema y el interés que puede tener para ellos, como en lo referente a las necesidades y beneficios que pueden obtener al escuchar.
Es importante el nivel de conocimientos acerca del tema sobre el cual se va a escribir, lo cual incide en la eficiencia del texto, por lo que es necesario previamente asegurar una adecuada información sobre el tema a tratar.
Verificar que los apoyos visuales estén en perfecto funcionamiento y su enfoque permita que todo el público pueda observarlos. Capítulo III
3 El texto expositivo como base del discurso
3.1. El discurso expositivo
Mark Twain decía que, por lo general, le llevaba tres semanas preparar un buen discurso, haciendo referencia al hecho de que los grandes discursos son resultado de una detallada preparación.
Un discurso antes de ser pronunciado de forma oral, es un texto. Por lo tanto, debemos pensar en textos escritos y orales. Entonces, se puede decir que la diferencia entre texto expositivo y un discurso es que el texto expositivo es la presentación oral o escrita de un tema desarrollado por el autor, tales como libros de historia, biología o cualquier materia, enciclopedias, artículos, periódicos, etc., y el discurso expositivo es la producción oral sobre el tema desarrollado, es decir, el producto material del discurso expositivo.
Una forma básica del texto expositivo es el discurso expositivo cuya finalidad es informar, es decir, su principal objetivo es transmitir e intercambiar conocimientos.
Lo que predomina en este tipo de discurso es la información acerca de una diversidad de temas que se explican o se exponen a fin de que un receptor comprenda los contenidos hasta entonces desconocidos.
En ese sentido, se dice que hay un predominio de la función referencial del lenguaje, pues al hacer uso de este tipo de discurso hacemos referencia a situaciones, temáticas, personas, o hechos determinados.
Para referirnos a la organización u ordenación de un texto o discurso, necesariamente debemos recordar cómo se define este último: el texto o discurso es un conjunto de uno o más enunciados portadores de sendas ideas transmitidas por un emisor a un receptor, de acuerdo con ciertos principios que determinan la eficacia de la comunicación y esto se obtiene cuando el texto o discurso se expresa atendiendo a los principios básicos de claridad y orden que faciliten su comprensión.
Esto se logra poniendo en funcionamiento una serie de factores o procedimientos lingüísticos, que pueden ser:
• Gramaticales, si están relacionados principalmente con la estructuración sintáctica.
• Discursivos, si se apoyan en el uso de ciertos modos de la enunciación.
• Organizativos, si están encargados de ordenar los contenidos transmitidos.
Algunas de las estructuras que puede adoptar el desarrollo en un discurso expositivo son las siguientes:
Enumeración: Se presentan una serie de fenómenos o conceptos relacionados entre sí por poseer algún rasgo común. La información se presenta a modo de enumeración de elementos con el fin de describir o caracterizar el asunto del cual se está hablando. Este tipo de organización viene indicada por el uso de conectores textuales del tipo: en primer lugar, por otro lado, además, y por recursos tipográficos o numeraciones. (4)
3.2. Partes del Texto Expositivo
La Introducción es la parte inicial, en ella planteamos el tema que desarrollaremos con posterioridad, es decir, se da a conocer el tema del texto, se expone el propósito del autor, los procedimientos a seguir y hechos a desarrollar. Es el momento de captar el interés y la atención del público receptor. Es en esta parte donde vamos a justificar el tema a tratar, y de ella va a depender que el auditorio nos preste toda su atención. Debe predominar un tono ameno y sugerente con el objeto de despertar el interés del oyente.
En la Introducción podemos hacer un breve mapa de las ideas principales de nuestra intervención en forma de guía, que le servirá al público para entender debidamente el resto de nuestra intervención. Debe ocupar aproximadamente el 10 ó 15% de nuestro discurso. Esta parte del Texto Expositivo marca la línea que va a seguir el resto del tema a tratar.
El desarrollo es la segunda parte del discurso expositivo o el centro del discurso y ocupará la mayor parte del tiempo de nuestra intervención, es decir viene a ser aproximadamente el 70% del mismo. Es además la parte fundamental e incluye de forma clara y ordenada, la información trascendental que se quiere transmitir, la explicación en sí misma. Es lo que se conoce como “información básica”.
En esta parte exponemos de forma razonada las ideas del tema objeto de nuestra exposición. Todas las explicaciones y pruebas que apoyen nuestro discurso tienen lugar en esta parte. Debe seguir un orden lógico para que no se pierda el hilo del discurso.
Conclusión: Es la parte final del texto expositivo, en él se resumen las ideas fundamentales que puede también reforzar la información expuesta. Es una recapitulación de las ideas principales donde se pueden dar opiniones, sugerencias o recomendaciones.
En la conclusión se deben de resumir los puntos principales del discurso expositivo de manera que la audiencia recuerde todo lo que se ha dicho.
3.3. Pasos para el desarrollo de un texto expositivo.
Para la elaboración o composición de un texto expositivo que puede servir como base de un discurso expositivo es necesario seguir cinco fases:
Tal como se dijo en el Capítulo I, focalizar consiste en centrar con exactitud el tema de la exposición, ¿de qué trata el texto? para determinar qué puntos son más relevantes o importantes que otros, con la finalidad de definir el alcance de la exposición y el lenguaje que se debe emplear, adecuándolo al público objetivo. Esta primera fase es primordial para asegurar la adecuación del texto.
Documentar la información que sea necesaria para la preparación de la exposición. Es imprescindible consultar documentos, libros, folletos, enciclopedias, artículos, tesis, páginas de Internet, etc.) para obtener información, la misma que se denominan fuentes de información. Debe de tenerse presente la focalización arriba mencionada para pensar de antemano aquellos aspectos del tema que son de interés y que apoyan la exposición, de modo que no se vaya a omitir información valiosa ni que se obtenga información irrelevante.
Una vez obtenida la información, es importante, organizarla, ordenarla y clasificarla en subtemas, tomando en cuenta que estos subtemas deben desprenderse del tema en sí; para ello, puede prepararse un esquema jerarquizando y agrupando las ideas principales de la exposición. Los criterios fundamentales a emplear para la organización del texto expositivo deben ser la claridad y la sencillez, de forma que se facilite lo más posible la comprensión del texto al público a quien va dirigido.
Luego se realiza la producción del texto, es decir la redacción, la cual consiste en transformar el proyecto, de una simple representación de ideas o de un esquema al texto final. La redacción debe hacerse considerando que se deben de emplear las reglas del leguaje, las propiedades del texto y las convenciones socioculturales.
Se debe de utilizar la técnica del borrador, redactando una o varias versiones para ordenar el texto lo que nos llevará a una versión definitiva.
Posteriormente revisaremos el texto donde se comparará lo escrito con los objetivos planificados, donde le daremos los últimos retoques para mejorar el texto expositivo. En esta fase se corregirá ortografía, redacción e incluso se puede hacer que participen tras personas para obtener opiniones de nuestra exposición.
Finalmente pasaremos al proceso de edición de nuestro texto, el mismo que es el resultado de las correcciones y verificaciones realizadas. En esta última fase se decidirán aspectos como diagramación presentación final. (5) Capitulo IV
Conclusiones
Para concluir con el trabajo, luego de haber analizado a fondo la información obtenida, podemos establecer que el texto expositivo es aquel cuya función primordial es informar o explicar, de manera objetiva, diversos temas, hechos, fechas, personajes, teorías, etc. Aquel donde el emisor, utilizando siempre la tercera persona, brinda una información que conoce de forma clara, precisa y ordenada a diferentes personas, sin agregar apreciaciones personales del autor.
El texto expositivo no es el que solo proporciona datos o información sino que también ofrece explicaciones con la finalidad de hacerlo más comprensible, por lo que se puede decir que además de informar también explica.
Adicionalmente, hemos visto que la base de todo discurso es el texto expositivo por lo que podemos manifestar que el texto expositivo es la base para que un orador logre un discurso coherente y bien estructurado, antes de una exposición, el mismo que sirve de ayuda al orador al momento del discurso.
Siendo ello así, el texto expositivo sirve al presentador para llegar al público de manera didáctica, ordenada y sin contratiempos. Además de ello brinda el aplomo necesario al exponente, lo cual se refleja en el discurso.
Asimismo, debemos recalcar la importancia del texto expositivo no solo para mantener el orden en el discurso y que el orador logre que el mismo se transmita de la manera correcta, sino que también la audiencia perciba el orden y capte de mejor manera la información.
La principal fuente de riqueza hoy es el conocimiento, el análisis, la comunicación efectiva de la información que la brindamos mediante el discurso, quienes tengan acceso a estas fuentes tendrán una ventaja competitiva muy importante y es precisamente a este tipo de competencias a las que la educación debe permitir tener acceso.
Finalmente, para desarrollar estrategias discursivas, debemos elaborar desde un principio un buen texto expositivo lo que beneficiará a cualquier orador en potencia, debido al poder que nos da el lenguaje a través de la palabra y por ende los discursos, el cual debe estar también acompañado con un desarrollo de valores éticos, ya que la perspectiva discursiva apunta además a un principio de responsabilidad y de respeto por el otro.

Bibliografía
1. Ramírez, Orlando Cáceres. About.com Ortografía y redacción. About.com. [Online] [Cited: Mayo 10, 2013.] http://reglasespano.aboout.com/od/tiposderedaccion/a/texto-expositivo.htm.
2. http://www.scribd.com/doc/2901838/El-texto-expositivo. Scribd. [En línea] [Citado el: 14 de Mayo de 2013.]
3. Porras, Arenas y. Hablar en público correctamente. Madrid : Edimat Libros, 2005. pág. 30.
4. Discurso_Procedimientos. Profesor en Linea. [Online] [Cited: Mayo 8, 2013.] http://www.profesorenlinea.cl/castellano/Discurso_Procedimientos.html.
5. Universidad, Privada Telesup. Comunicación II.
6. Castillo Valeriano, María del Rosario. Manual de Comunicación Oral y Escrita. Lima : Universidad Ricardo Palma, 2004.

Anexo 1
Ilustración de los textos expositivos Anexo 2
Ilustración de las partes de los textos expositivos