6. El Estado de las Autonomías

Desde 1977 España consiguió la estabilidad democrática. La consolidación de la democracia está íntimamente ligada a la construcción del Estado de las Autonomías.
La gobernación del Estado sólo es posible con el apoyo de las fuerzas nacionalistas moderadas (sobre todo CIU). Jordi Pujol retiró apoyo gobierno PSOE, precipitó elecciones y fue nuevamente necesario el apoyo de las fuerzas periféricas para el gobierno del PP.
Tras 14 años de gobierno socialista, la alternancia política en España sólo fue posible mediante la firma de un pacto a tres bandas entre PP, CIU, PNV y CC (cuyo contenido expresa importantes concesiones de competencias y recursos financieros a las CCAA).
Por lo que la interdependencia de las distintas fuerzas políticas territoriales es fundamental para el funcionamiento político español.
 Fortalecimiento del Estado (integración de la periferia)
 Mutación de la organización territorial.
La interdependencia se acentúa con la integración en la UE (soberanía fragmentada).

I. EL NUEVO MARCO TERRITORIAL
Transición: 1) del autoritarismo a la democracia 2) del centralismo a la descentralización
La nueva organización territorial debía garantizar coexistencia de varias identidades nacionales.
1. La distribución territorial del poder
2 fracasos: La ausencia de un estado liberal y la fragmentación de la identidad nacional.
Bajo franquismo  crisis del Estado favoreciendo legitimación nacionalismos catalán y vasco.
1978 negociación de los principios del modelo territorial desembocó en un consenso suficientemente ambiguo para ser aceptado por la mayoría de las fuerzas políticas. Un modelo híbrido, complejo y de difícil implementación. También facilitó que se dieran las demandas de autonomía

La ausencia de un programa descentralizador, emergencia élites periféricas, rivalidad entre ambas formaciones políticas y las luchas internas UCD  propiciaron la heterogeneidad del mapa autonómico español completado en 1983.

Las nacionalidades estaban basadas en características culturales, étnicas, regiones tradicionales, macroregiones improvisadas y provincias regionalizadas.
2. Los condicionantes constitucionales

La distribución territorial del poder contiene elementos de flexibilidad para facilitar la homogeneización y tb para incrementar las cotas de autonomía (ya q no aparece fijada).

148 CE: competencias de las CCAA
149.1 CE: verdadera distribución del poder entre el Estado central y las CCAA.
Se trata de un régimen de competencias compartidas y las autoridades centrales no tienen poder sobre las autonómicas cuando estas actúan dentro de su marco de competencias.

Las CCAA gozan de autonomía financiera con arreglo a Hacienda a y a los principios de solidaridad interterritorial (constitucionalizada con la creación del FCI).

II. FUNCIONAMIENTO EFECTIVO DEL ESTADO DE LAS AUTONOMÍAS

1. Las relaciones intergubernamentales

Conflictividad es la característica dominante en los años 80.