Un día don Luis se siente tan enfermo que le dice a su mujer. - Maria, tengo que quedarme en la cama. Me siento demasiado débil.
Su mujer le contesta: - Luis, dentro de un par de días vas a sentirte mejor. Pero no debes de quedarte en cama mucho tiempo porque es un lujo.
- Estoy de acuerdo - responde don Luis - es un lujo. No debermos llamar a un médico. Es mejor rezar a los santos porque no cuesta nada.
Sin embargo, don Luiz se pone peor y, finalmente, tiene que llamar a un m´dico. Cuando llega el médico, don Luis le pregunta en seguida cuánto cobra por cada visita.
- Le va a costar diez pesetas por cada visita declara el médico.
- Qué barbaridad! Eso es mucho dinero! - exclama don Luis.
- Sí, es demasiado caro - dice doña Maria.
- Le doy siete pesetas - dice don Luis.
- Le podemos dar hasta ocho - añade doña Maria.
Don Luis le muestra el brazo izquierdo: - Aquí tiene para tomarme el pulso, pero tengo que decirle que no quiero recetas caras. Los tiempos están muy malos.
- El que está muy malo es usted! - exclama el médico. - Come usted bien?
Claro que si! - dice doña Maria - mi marido come todas las mañanas un panecillo entero. - Es necesario darle más de comer - dice el médico. - Le gusta la carne?
De fire ESP
En dag Don Luis følte sig så syg, at han fortæller sin kone. - Maria, jeg er nødt til at blive i sengen. Jeg er for svag.
Hans kone svarede: - Luis, inden for et par dage vil du føle dig bedre. Men du bør ikke ligge i sengen i lang tid, fordi det er en luksus.
- Jeg er enig - Luis reagerer - er en luksus. Debermos ikke kalde en læge. Det er bedre at bede til de hellige, fordi det koster ingenting.
Men Don Luiz bliver værre og til sidst nødt til at kalde en sundhedsperson. Da lægen kommer, Don Luis derefter spurgt, hvor meget de opkræver for hvert besøg.
- Det vil koste ti ESP for hvert besøg lægen anmelder.
- Hvor forfærdeligt! Det er en masse penge! - Udbryder Don Luis.
- Ja, det er for dyrt - siger Dona Maria.
- Jeg giver syv ESP - siger Don Luis.
- Vi kan give op til otte - tilføj Dona Maria.
Don Luis venstre arm viser: - Her er min puls, men jeg må sige, jeg vil ikke have dyre recepter. Tiderne er meget dårlig.
- Det er meget forkert du er! - Udbryder lægen. - Man spiser godt?
Sikker på du gør! - Siger Dona Maria - min mand spiser hver morgen en hel bagel. - Det er nødvendigt at have bedre spisevaner - siger lægen. - Du kan lide kød?
- Claro que me gusta! - contesta don Luis. - Pero es demasiado cara. - Aún asi, usted tiene que comer mucha carne y beber buen vino y mucha leche, y trabajar muy poco.
Don Luis está asustado y también lo está doña Maria. El médico dice que va a volver al dia siguiente.
- Si no es absolutamente necesario, no tiene que molestarse en venir - le dice don Luis.
Y de muy mala gana doña Maria le paga al médico ocho pesetas.
El médico se va y los esposos se miran en silencio durante algunos minutos.
- Nos va a arruinar! - exclama finalmente don Luis.
- Trata de levantarte, Luis, porque ti enfermedad nos cuesta un dineral - le dice doña María.
Don Luis trata de lacantarse pero no puede. Doña María le trae un pedazo de queso para ver si se pine mejor con eso, y le dice: - Aqui tienes comida fuerte.
Asustado, él le pregunta: -Y de dónde sale este queso?
- Me lo acaba de dar una vecina.
- qué rico es!
- Pues, come porque estás muy débil.
Al dia siguiente el dédico regresa, examina a don Luis y devlara que está peor. En seguida manda a doña María a la farmacia para domprar una medicina.
Doña María va, pero de mal humor. Cuando el empleado le da la medicina, ella pregunta: - Cuánto cuesta?
- Tres pesetas.
- Tres pesetas! Está usted loco? Esto es un robo! - y casi se desmaya.
Al saber lo que ccstó la medicina, don Luis se pone peor y sólo quiere tomar unas gotitas pues así le va a durar más tiempo.
- Selvfølgelig kan jeg lide! - Besvarede Don Luis. - Men det er for dyrt. - Alligevel skal du spise en masse af kød og drikker god vin og masser af mælk, og meget lidt arbejde.
Don Luis er bange og så er Dona Maria. Lægen siger, at han vil vende tilbage næste dag.
- Hvis det ikke er absolut nødvendigt, behøver ikke at bekymre coming - fortæller Don Luis.
Og meget modvilligt Dona Maria betaler lægen otte pesetas.
Lægen og parret vil se ud i stilhed et par minutter.
- Vi vil ødelægge! - Don Luis endelig udbryder.
- Prøv at komme op, Luis, fordi du koste os en formue sygdom - fortæller Dona Maria.
Don Luis er lacantarse men kan ikke. Doña Maria bringer et stykke ost for at se om det er bedre fyr, og siger: - Her er maden sikker.
Skræmt, spørger han: "Og hvor kommer denne ost?
- Jeg var lige givet en nabo.
- Er yummy!
- Jamen, du spiser, fordi du er for svag.
Den næste dag han helliget afkast, undersøger Don Luis og devlara der er værre. Så sender María domprar apoteket for medicin.
Doña Maria er, men lunefuldt. Når medarbejderen giver lægemidlet, spørger hun: - Hvor meget?
- Tre pesetas.
- Tre pesetas! Er du sindssyg? Dette er et røveri! - Og næsten besvimede.
Vide, hvad ccstó medicin, Luis bliver værre og bare ønsker at tage et par dråber og så vil det vare længere.
Al dia siguiente el médico regresa y encuentra a don Luis mucho peor.
- Este pobre hombre se muere de frío. Doña María, debe usted comprarle mejor ropa.
- Mejor ropa! - exclama doña María.
- Eso no se necesario - murmura don Luis - la ropa vieja es bastante.
Don Luis va de mal en peor. El médico devlara que come no obedecen sus órdenes, él no va a visitarle más.
- Doña Maríe, debe usted comprarle buen vino y darle un vasito cada do horas. De otro modo su marido va a seguir empeorando.
- Pero, doctor, el buen vino es tan caro!....
- No tengo más que decir - y el médico se marcha bastante enojado.
A doña María no le queda más remedio que ir a buscar vino. A su regreso, su marido le pregunta: - De dónde vienes?
- De comprar un buen vino - contesta la esposa. - Bastante caro, por cierto.
Cuánto?
- Cuatro pesetas.
- Cuatro pesetas! - repite son horror don Luis, mientras deja caer la cabeza pesadamente.
......Así es como muere don Luis.