En No pasó nada por Antonio Skårmeta, una familia chilena está obligada a exiliarse en Alemania. El gobierno chileno fue derrocado y la familia no tuvo otra opción que abandonar el país. La transición de chile a Alemania fue muy difícil para la familia. Hay un puente entre la cultura alemana y la cultura chilena que hizo difícil la adaptación. No pasó nada es una novela sobre el crecimiento. Lucho, el personaje principal y el protagonista, se pone en una situación donde se ve obligado a crecer más rápido de lo que lo haría normalmente. Es difícil crecer en general sino crecer en un país extranjero es aún más difícil. Lucho desarrolla ciertas características que le permiten adaptarse y transición en esta nueva sociedad. Lucho es sarcástico, independiente y madura. Esas tres características permiten Lucho para adaptarse a este nuevo estilo de vida.
Cuando Lucho llega primero a Alemania, tiene que lidiar con muchos problemas. Su familia tienen hambre y no tienen dinero suficiente. Se ponen en una situación horrible y es difícil para la familia hacer frente a estos problemas. La madre llora todo el tiempo porque quiere volver a Chile. Además, nadie en la familia entiende a Inglés. La situación no puede ser peor porque, “Al comienzo no nos acostumbrábamos para nada. Mi papá y mi mami no tenían trabajo, mi hermano chico se enfermó con mucha fiebre por el cambio de clima y vivíamos en una pieza los cuatro en el departamento de un amigo alemán que había estado en Chile.” Para distender el ambiente, Lucho forma una personalidad sarcástica. Su sarcasmo le ayuda a aliviar situaciones. Los acontecimientos traumáticos no están tan traumático con el uso del humor. Él lo hace parecer como aunque nada le afecta, cuando en realidad, la situación le hace muy molesto. Es evidente que le encantaría volver a chile ya que compara todo en Alemania a chile. Sin embargo, él utiliza su personalidad sarcástica como un mecanismo de defensa.
En segundo lugar, Lucho demuestra que él es responsable e independiente en el curso de la historia. Aunque es sólo un niño, tiene la responsabilidad de ser el traductor para la familia. La familia no entiende el alemán, por lo tanto, Lucho tiene que traducir las noticias y contestar el teléfono. La familia es totalmente dependiente de Lucho y su capacidad para entender el lenguaje. Además, podemos ver habilidades de supervivencia de Lucho cuando decide que es buena idea para comer las muestras en el supermercado. Él se da cuenta de que puede utilizar el supermercado cuando, “…hacía mucho frío me metía al sexto piso del KaDeWe y allí no lo pasaba mal. Siempre hay señoritas que ofrecen cosas de propaganda en la sección comestibles, y yo agarraba de esto y lo otro. Un pedazo de queso, después una galleta…Si uno hacia la vuelta completa, podría darse por almorzado.” Aunque es una escena cómica, la demuestra mucho sobre la personalidad de Lucho. Cuando él mostró su padre su propia forma de encontrar comida, su padre estaba muy orgulloso de sus habilidades de supervivencia. Lucho es completamente capaz de ser por su propia cuenta
En tercer lugar, Lucho finaliza su viaje a través de la adolescencia y se convierte en un hombre joven maduro. El padre de lucho lo obligó a convertirse en un hombre, diciendo que no debe llorar y debe proteger a las mujeres. Lucho soporta los códigos de su padre. Durante el incidente con Hans, Lucho sólo quería proteger a Sophie. Entonces, cuando Michael quería pelear con Lucho, Lucho demostró que no era un cobarde. Antes de pelear, Lucho le dijo a Michael que no era necesario luchar. Tratando de calmar Michael cual mostraba su madurez. Él dijo, “Oye, Michael…Yo no quiero pelear contigo. Primero, porque eres mucho más grande y fuerte y seguno porque…No puede polear contigo porque no tengo ganas. No me dan ganas de pegarte. Uno pelea cuando tiene rabia.” Lucho no es un cobarde por no querer pelear, pero suficientemente inteligente para saber que la lucha es innecesaria. Cuando Michael decidió luchar, Lucho defendió valientemente. Después de la pelea, Lucho invita a Michael a pizza. Ambos ganaron un respeto mutuo, que es un signo de madurez. Si Lucho no hubiera sido tan madura cuando se trata con estos conflictos, él no sería capaz de manejarlos.
En conclusión, Lucho crece en un notable joven. De todas las travesuras que consiguió en, él aprendió de cada uno. Usó su sarcasmo para sostener en sus emociones. Esto puede ser visto como algo bueno o malo pero terminó beneficiando a Lucho en el final. Era capaz de mantenerse de estar deprimido. Cuando toda su familia dependía de él, dirige para ser el líder. Sus atributos independientes y responsables le ayudó a sobrevivir la cultura alemana. Por último, la característica final que demuestra cuánto creció es su madurez. Él se metió en muchos desastres pero manejándolos maduramente. Juntas, estas características le ayudó a sobrevivir el traslado a otra parte del mundo.