Identidad del Mexicano | La estructura psicológica de la familia mexicana | Psicología del Mexicano: Descubrimiento de la etnopsicología. | | Mariel Cházaro Fuentes | 30/11/2015 |

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Mariel Cházaro Fuentes
La estructura psicológica de la familia mexicana
Identidad del mexicano

Objetivo de la presentación:

Dar a conocer a los participantes la estructura psicológica de la familia mexicana, de la cuál se desglosan los roles que niña, niño, mujer y hombre, en sus diferentes etapas se espera; ejersan en la sociedad.
Las tres relaciones que se dan al interior de la familia

a. Supremacía del padre.
Premisas generalizadas implícitas, o presupuestos socioculturales generalizados que sostienen, desde algo muy profundo, la superioridad indudable, biológica y natural, del hombre sobre la mujer.

b. Madre sacrificada.
El papel de la madre en México ha acogido la abnegación como el ejemplo máximo de entrega y amor de ésta hacia sus hijos.

c. Diferencia entre niño y niña.
Las diferencias en el trato entre un niño y una niña en México se presentan incluso antes de nacer, cómo deben comportarse, cómo deben jugar, de qué forma tienen que crecer y otras más cuestiones provienen de las proposiciones socioculturales indicadas y conclusiones de las premisas.

El hombre
Niñez: Debe desarrollarse de acuerdo a su papel de varón, se desaprobará toda demostración de interés tipo femenino, jugará con pistolas, cascos, caballitos, espadas, etc. El signo de virilidad en el hombre es el valor de temeridad, agresividad y el no rajarse. Pero deben ser obedientes respecto a la familia.
Adolescencia: El signo de virilidad es hablar o actuar en la esfera sexual. Persiguen a la mujer ideal, aquella que deseen convertir en su esposa y a la hembra sexualizada, con el único propósito de mantener relaciones sexuales.
Adulto: La virilidad será medida por la potencia sexual, el tamaño de los testículos, el pene y secundariamente por la fuerza física, valor o audacia.
Padre: Su indisputable autoridad en el hogar puede explicarse por el hecho de que él tiene testículos y ella no. Poco después de concluir la luna de miel pasa de esclavo a rey. Hacia sus hijos muestra afecto, pero antes que nada, autoridad. Demanda adherencia a los preceptos religiosos maternales pero él no los sigue.

La mujer
Niñez: Su nacimiento tiene rasgos de tragedia emotiva si sucede antes del nacimiento de un varón, se considera mal negocio y preocupación moral de la familia. Debe crecer hasta ser feminidad superlativa, la maternidad. Juega con muñecas y casitas y se mantiene alejada de los juegos bruscos. Deberá ser graciosa y coqueta, vestir como mujer y mantenerse limpia.
Adolescencia: Será retornada al hogar después de la primaria y serán codiciadas por los hombres, la castidad y los otros factores de la feminidad continúan siendo muy importantes. Aprenderá mejor los variados aspectos de su papel en la vida, planchar, lavar, cocinar, comprar la ropa interior de sus hermanos y estará siempre alerta para complacer sumisamente el menor de sus deseos.
Adulta: Se le dedicarán poemas y canciones, será sujeta a galantería y de toda la ternura que el mexicano es capaz, entra en éxtasis por resultado de esta veneración, de la sumisión de esclava a reina.
Madre: Sus hijos la considerarán el ser más querido que existe, no será considerada objeto sexual y la sexualidad deberá ser practicada de diferente forma para que ésta no desarrolle demasiado interés por el sexo, así entra en el camino de la abnegación antes de convertirse en madre. Es profundamente afectuosa, tierna y sobreprotectora.

Bibliografía
Díaz-Guerrero, R. (n.d.). La estructura psicológica de la familia mexicana. In Psicología del Mexicano: Descubrimiento de la etnopsicología. Trillas.