ARTICULO 1
La reciente aprobación de la eutanasia en Holanda ha desatado la condena por parte de la Iglesia Católica y organizaciones afines. En México, especialistas en derecho, filosofía, medicina y religión debatirán sobre sus implicaciones éticas y legales. Para Paulette Dieterlen, directora de Investigaciones Filosóficas de la UNAM, un concepto fundamental de esta discusión es el de autonomía: el derecho de cada persona a determinar cuando concluir su propia vida, sin que esta acción sea penalizada o condenada moralmente.
Debatir acerca de la eutanasia implica discutir sobre el derecho de cada persona de decidir sobre la duración de su propia vida y la forma de morir, asegura la doctora Paulette Dieterlen, directora del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
"La autonomía es, en este sentido, la posibilidad que tengo de decidir sobre mi propia muerte. De esta posición se deduce que las personas tenemos el derecho moral de terminar con nuestra vida y que, por otro lado, esa acción no debe ser penalizada ni condenada moralmente", asegura la doctora en filosofía, quien participara en el debate titulado "Eutanasia" que celebrara a partir del lunes 23 el Instituto de Investigaciones Juridicas de la UNAM.
El pasado 10 de abril el Senado holandés, respaldó la ley denominada "prueba de petición de terminación de la vida y asistencia al suicidio", acción descalificada inmediatamente por El Vaticano. En México, abogados de Chihuahua han sugerido la posibilidad de despenalizar el delito de eutanasia y en su lugar establecer una "ley de asistencia al suicidio".
- Cuales son las implicaciones éticas de la eutanasia?
-Son muy variadas y de muy diversa índole. Desde el punto de vista de la ética, de la filosofía moral, nos enfrentamos a un problema en el que realmente se dificulta dar soluciones. Cuando hablamos de eutanasia -en realidad la raíz etimológica es una muerte suave, una muerte dulce- tenemos que distinguir muchísimos casos. No es lo mismo la eutanasia voluntaria, cuando la persona consciente decide que su vida termine, que la no voluntaria, cuando la persona ya no puede decidir y otras personas serán las que decidan por ella. Mientras que en el primero el concepto que se maneja mucho es el de autonomía -y ahí es donde creo que se maneja muy correctamente el derecho de una persona a elegir su muerte-, en la eutanasia no voluntaria el asunto se complica. Aquí se conjugan muchos agentes que toman las decisiones: la familia, los médicos, los jueces...
La eutanasia voluntaria no deja de tener complicaciones. Existe el derecho de la persona a elegir su muerte, pero en algunos casos la autonomía del paciente puede ir contra la del medico.
Otra distinción muy importante es sobre eutanasia pasiva y activa. Una cosa es inyectar a una persona potasio y otra no hacer nada para salvarla. Es una tesis muy discutida la diferencia entre acción y omisión, si desde el punto de vista moral es igualmente correcto hacer que dejar de hacer. Hay casos de eutanasia pasiva donde nos alejamos de la definición de muerte sin dolor: la desconexión de un respirador artificial puede ocasionar un sufrimiento por asfixia.

-Son incompatibles la etica profesional y las creencias religiosas?
- De los estudios que yo he hecho sobre el tema, en general no suelen ser compatibles. Las posiciones religiosas se basan en un argumento fuerte que es "Dios da la vida, Dios quita la vida". Por ejemplo, un suicido era ir en contra de un donativo que Dios nos había hecho y el mas grande que nos puede hacer. Hay otra tesis -ya no directamente relacionada con Dios- de la santidad de la vida. "La vida es una cosa santa y hay que conservarla y preservarla pase lo que pase". Las religiones tienen dificultad en aceptar la eutanasia. Por eso se discute mucho el tema de la eutanasia en países que son liberales, con pluralidad de creencias.

-Como es el caso de Holanda...
-En Holanda la eutanasia ya se practicaba. Ahora ya tiene estatus legal y le pusieron varios candados. Por ejemplo, hay un comité que decide, el paciente tiene que estar absolutamente consciente, debe haber un estudio sociológico, un estudio medico. Es decir, tener absoluta seguridad de que, aunque la vida sea un bien, es preferible la muerte.

-Por que, al margen de dogmas religiosos, es perceptible cierta oposición histórica a la eutanasia?
-En todos los textos que se escriben sobre eutanasia hay un fantasma muy grande. Es un concepto que se llama Gnadentod, que se acuno en Alemania, donde todas las personas que se consideraban que no servian, que no eran productivas y que no podian ser reproductivas, las metieron a las camaras de gases. Mataron a 275 mil personas en 1939. Y claro, existe ese fantasma. Es decir, queremos vivir en un mundo donde alguien decida que a todos los ninos con sindrome de Down los maten? Es un problema muy complejo.

Existe una intuición muy fuerte que es: ¿tenemos el derecho a elegir nuestra propia muerte? Creo que es un derecho y un derecho muy fuerte. Sin embargo, hay que ver que no todos los casos son el ejercicio de un derecho y, sobre todo, creo que hay que ser muy cuidadosos sobre cuales son las condiciones para ejercer ese derecho.

Dieterlen explica que la autonomía es un concepto inscrito en el lenguaje de los derechos e implica que cualquier persona debe estar en posibilidad de controlar la duración de su vida y la forma de su muerte.

-Es posible sostener un debate abierto sobre la eutanasia en México, en un momento en que grupos de pensamiento conservador están ocupando posiciones de poder?
-Ahora es justamente cuando necesitamos hacerlo. Es una batalla que hay que librar, definitivamente. Hay ciertos valores que estaban en el ambiente y ahora vemos la amenaza de que puedan desaparecer y es ahora cuando hay que discutirlo y dar argumentos.
Si a mi me dicen que la vida es un regalo de Dios, que entendemos por vida? Si por vida entendemos nada mas que no se pare el corazón y estar entubado en siete maquinas, deshaciendo a las familias, eso es vida?
Si a mi me dicen "la santidad de la vida", por ejemplo, hay que ver que es vida. Vida biológica o vida es algo mas? Si es una persona que esta llena de tubos, que no esta consciente, creo que estaríamos limitando mucho el concepto de vida.
Vamos a discutir que significa vida. Vida significa también la autonomía y la capacidad de tomar decisiones. El concepto de vida vamos a ampliarlo, creo que todo esto tenemos que discutirlo en el clima mas liberal posible.

-Que significa la autonomía en el contexto de la eutanasia?
-La autonomía es, en este sentido, la posibilidad que tengo de decidir sobre mi propia muerte. De esta posición se deduce que las personas tenemos el derecho moral de terminar con nuestra vida y que, por otro lado, esa acción no debe ser penalizada ni condenada moralmente. Si tomamos seriamente el concepto de autonomía no hay nada que impida que podamos pedir ayuda para que nos asistan en el momento de la muerte, ya sea dejándonos de dar el tratamiento medico o ayudándonos a quitarnos la vida.

-Cual debe ser el papel del filosofo en el debate de la eutanasia?
-Los filósofos pueden ayudar a tomar decisiones, como personas que pertenecen a comités de ética en hospitales como ya sucede en Estados Unidos y Francia. Casi siempre hay un filósofo, aunque ellos no van a tomar la decisión final. La filosofía puede dar luz sobre estos conceptos.

ARTICULO 2
La eutanasia: ¿Es lícito anticipar la muerte de un enfermo grave?
Por Carmen Cantú de Huerta

Cada vez se practican más casos de eutanasia en los hospitales, y debido a ello la gente está deseosa de saber qué es lo correcto.

Por su parte, toda persona tiene derecho a morir humanamente, con dignidad, con la atención adecuada, con todos los avances de la ciencia al servicio del hombre, para que se pueda mitigar el dolor y alargar la vida del enfermo de un modo digno.

Por otro lado, se ven casos en los que al enfermo se le alarga la vida con medios extraordinarios (respirador artificial, etc.)

Se retrasa artificialmente la muerte de éste con duros sufrimientos y repercusiones psíquicas, dejándolo en un estado vegetativo.

Esto es algunas veces porque los familiares se resisten a perder a un ser querido y otras por la comercialización de la medicina.

Se practican operaciones y se dan tratamientos largos, dolorosos y costosos, a sabiendas de que el enfermo no se va a recuperar.

Viendo cómo están las circunstancias, vienen a la mente estos interrogantes:

¿Es ilícito anticipar la muerte de un enfermo ya agonizante, por evitar el dolor físico y por acabar de una vez con la repugnancia psíquica del momento de transición?

¿Es lícito acabar con los gravemente tarados, los desahuciados, los incurables, los dementes, los viejos, los incapaces?

¿Son normalmente admisibles en estos hechos, los motivos de afecto, de economía, de bienestar social o de razones raciales?

¿Cuál es la posición correcta?

Primero hay que definir qué es la eutanasia: el vocablo significa "supresión piadosa" o "comportamiento que intenta abreviar la vida del moribundo por piedad".

Según los motivos por los que se practica, la eutanasia se divide en:

"Eutanasia agónica", provocada a los moribundos.

"Eutanasia eugénica", practicada a los sujetos que padecen alguna tara.

Eutanasia de los incurables que se practica a los desahuciados.

"Eutanasia racial", cuando se aplica a determinados sujetos en defensa de la raza.

"Eutanasia económica", la que se aplica a individuos "inútiles" para la sociedad y necesitados de asistencia excesiva y curas costosas.

"Eutanasia de los nonatos monstruosos".

De acuerdo a la forma con que se provoca, la eutanasia se divide en:

Negativa (o pasiva) y

Positiva.

La negativa o pasiva consiste en omitir de un modo planificado los cuidados que prolongarían la vida del enfermo, es decir, no recurrir voluntariamente a los medios de salvación disponibles para todos.

La eutanasia positiva es la acción directa y voluntaria para procurar la muerte antes de lo que podría esperarse en la misma situación.

a) Punto de vista moral.

Desde el punto de vista moral, la eutanasia va contra la ley de Dios: "No matarás al inocente y al justo", dice la Biblia, Ezequiel 23-17. En el Quinto Mandamiento se repite de una manera igualmente absoluta.

Actualmente se practica la eutanasia al agonizante, al tarado, al llamado inútil, pero ni el médico en nombre de la ciencia, ni los parientes en nombre de la piedad pueden creerse autorizados (sin importar cualquiera sea la gravedad de la situación) para matar al paciente, pues todos estamos obligados de idéntica manera al respeto absoluto de la vida.

b) La eutanasia es "contra natura".

El homicidio contradice las exigencias más profundas del hombre en cuanto a su ley natural, que son: la intensidad de su apego a la vida, el saberla valorar y, por lo mismo, cuidarla y preservarla en cualquier circunstancia.
Filosóficamente esto se funda en el derecho exclusivo de Dios sobre la vida.

Sólo puede destruir una cosa quien es su dueño, y nadie duda que el verdadero y total propietario de las personas es Dios, ya que él nos da la existencia y nos la conserva día a día.

Dejarse morir, o poner a otros en condiciones de morir, es también disponer ilícitamente de la vida humana, es siempre homicidio.

c) El sufrimiento no es motivo para practicar la eutanasia, porque es muy difícil evaluar el grado de dolor que vive el paciente, pues las manifestaciones externas no siempre responden a la intensidad del sufrimiento.

d) Tampoco es válido el criterio de la inutilidad. Tanto los ancianos, como los enfermos crónicos tienen derecho a la existencia, pues lo han ganado con el trabajo cumplido cuando estaban en edad productiva.

Aun cuando hay personas que jamás han podido trabajar, tienen derecho a la solidaridad humana. Ellos no son responsables de su desgracia, enfermedad o vejez.

e) Distanasia. Se entiende por distanasia la práctica que trata de prolongar la vida de un enfermo incurables utilizando medios extraordinarios, con un afán desmesurado de alargar esa vida, en general sólo vegetativa. Esta práctica va en contra del derecho de morir humanamente.

No hay obligación de recurrir a tratamientos extraordinarios para prolongar la vida de un enfermo moribundo.

Es conveniente aclarar que la eutanasia positiva, o sea la que actúa directamente en coartar la vida del moribundo, es siempre ilícita y está considerada como homicidio.

ARTICULO 3
Mientras unos ven en la eutanasia una practica piadosa, otros la consideran un 'asesinato disfrazado'.

El debate en torno a la eutanasia sigue abierto y dando de que hablar. En distintos paises la discusion es casi tan candente como enredada. Los que estan a favor, argumentan que si el dolor de una persona es mayor a lo que puede resistir, debe tener derecho a terminar su existencia con ayuda medica. Por otro lado, quienes se oponen a esta practica dicen que legalizarla puede ser el peligroso inicio de un camino de bajada en que la sociedad tolerara actos cada vez peores.

En la acepcion actualmente predominante, eutanasia es la accion u omision que permite, acelera o provoca la muerte de un paciente terminal o de un recien nacido con graves malformaciones, para evitar sus sufrimientos. Los argumentos mas solidos en favor de la eutanasia apuntan hacia la compasion como base moral de esta practica.

Proposiciones y practicas eutanasicas ha habido en distintas epocas y culturas. A veces han sido las normas sociales las que han determinado cuando una persona enferma o anciana debe morir en beneficio del grupo. En otras ocasiones se ha atribuido al rol del medico el favorecer la muerte de los enfermos incurables o de quienes carecen de utilidad social.

En la actualidad, apelando al principio etico de la autonomia, autores y grupos defienden la legitimidad de ayudar a morir a un paciente informado y competente que lo solicita o de aceptar la decision de quien represente los mejores intereses del enfermo si este no puede expresar la peticion.

Factores determinantes del debate actual sobre la eutanasia serian la incapacidad de la profesion medica de aceptar la muerte inevitable y de poner limites al uso de una tecnica capaz de mantener por tiempo indefinido una vida meramente biologica del cuerpo, cuando ya no existe posibilidad de una existencia realmente humana; el reconocimiento del paciente como agente moral autonomo y la afirmacion de la libertad como supremo valor del hombre.

Matar o dejar morir

La distincion entre accion y omision -eutanasia activa o pasiva- apunta a la diferencia existente entre matar y dejar morir, conceptos susceptibles de diferente valoracion moral. En el primer caso, el paciente muere como consecuencia directa de los acontecimientos iniciados por el agente. En el segundo caso, el paciente muere porque el agente no interviene en la evolucion de la enfermedad que ya esta en marcha y que no son provocados por el. Segun esto, tanto no comenzar con una terapia como retirarla una vez iniciada serian omisiones que dejan morir (eutanasia pasiva).

Los argumentos a favor de permitir la eutanasia (voluntaria, activa, directa) se basan en la compasion, considerando cruel rehusarse a librar al enfermo incurable de una situacion de padecimientos e indignidad, y en la primacia de la autonomia del paciente, en el respeto a su autodeterminacion, reconociendole el derecho a decidir cuando abandonar la lucha por la vida cuando esta implica sufrimientos que el no puede afrontar y que la medicina no puede suprimir o aliviar.

En oposicion a la legalizacion de la eutanasia, se argumenta que la vida humana es un valor superior, cuyo respeto posibilita la convivencia social, y que la finalidad de la medicina es precisamente ese respeto, siendo completamente ajeno a ella el acto de matar. Al autorizar la eutanasia se cambiaria radicalmente la relacion medico - paciente, creando en la sociedad una desconfianza hacia los profesionales de la salud, y se desmotivarian los esfuerzos para progresar en la busqueda de terapias eficaces para las enfermedades que hoy en dia se consideran incurables.

Eutanasia legal

En Holanda se ha despenalizado la eutanasia, bajo las siguientes condiciones: que el paciente este informado sobre su enfermedad y conozca las posibles alternativas existentes; que el enfermo encuentre insoportable su sufrimiento fisico o mental; que el deseo de morir sea firme; que su decision sea personal y libre, sin presiones sociales; que el medico consulte a un colega sobre la determinacion de aplicar la eutanasia, asegurandose que existen causas suficientemente graves para fundamentarla; y que el profesional informe a las autoridades judiciales, comunicando las circunstancias en que se ha tomado tal decision y el metodo que ha empleado.

Los medicos, en ese pais, comenzaron a interrumpir el agua y los alimentos para tales pacientes. Sin embargo, pronto advirtieron que estos morian con lentitud, dolorosamente, situacion que era psicologicamente tensionante para los familiares y el personal medico, ademas de costosa. "Por que torturarlos? Si nosotros los estamos matando, por que no hacerlo rapidamente y sin dolor?", dijeron. Y a partir de este razonamiento los medicos holandeses empezaron a usar inyecciones letales. Los datos relacionados con el tema no son exactos, pero se acepta que en 1986 los medicos mataron de 5000 a 20.000 personas sobre un total de 120.000 muertes

Hoy en dia la mayoria de los medicos se opone a la eutanasia activa y directa, pero para que este rechazo sea sostenible y consistente se requiere la sistematica abstencion de terapias inutiles o desproporcionadas y la debida atencion a las necesidades de los paciente. A la inversa, proponer la legalizacion de la eutanasia, despreocupandose de los posibles y necesarios cuidados paliativos y manteniendo la tendencia a abandonar al enfermo terminal, con lo que se deja a este en una situacion de sufrimiento fisico y psicologico que le hace ansiar la muerte, parece transgredir gravemente el principio de justicia.

La altemativa real para la eutanasia es cuidar con amor y adecuadamente a los moribundos. Un nuevo concepto para el manejo de estas personas surgio en Inglaterra, en donde instituciones llamadas hospicios se encargan de proporcionar un cuidado compasivo y calificado a estos pacientes. Este concepto se extendio a Canada y los EU, paises en los que encontro rapida aceptacion.

Una vez que un paciente se siente bienvenido y no una carga para otros, una vez que su dolor ha podido ser controlado y se han aliviado otros sintomas hasta llevarlos por lo menos a proporciones manejables, entonces el clamor por la eutanasia desaparece.

La altemativa es un cuidado adecuado, y este cuidado puede ponerse a disposicion de todos desde el momento en que comience a brindarse una adecuada instruccion a los estudiantes de medicina en los hospitales docentes.

Clasificacion

La eutanasia, ampliamente definida, puede ser clasificada desde diversos puntos de vista formulandose distinciones relevantes en el debate sobre su fundamento etico:

- Eutanasia voluntaria: La decision la toma el paciente directamente o terceros, obedeciendo los deseos que el paciente ha expresado con anterioridad.

- Eutanasia no voluntaria:La decision la toma un tercero sin que haya habido posibilidades de conocer la determinacion del enfermo.

- Eutanasia involuntaria: La decision la toma un tercero sin pedir el consentimiento de un paciente capaz de expresar su eleccion o en contra de su voluntad.

- Eutanasia activa. La muerte se produce por administracion de agentes que la provocan directamente, como las inyecciones letales.

- Eutanasia pasiva. Se produce por omision, lo que podemos entender como la abstencion o retiro de terapias necesarias para mantener al paciente con vida.

- Eutanasia directa. Cuando la accion u omision intenta la muerte del paciente.

- Eutanasia indirecta. La accion u omision no busca la muerte del paciente, pero se es consciente que esta puede producirse como efecto secundario no deseado de dicha accion u omision.